Cartón y arsénico para merendar?

Te voy a dar una razón buena para que dejes el plan del azúcar y la harina.
Vivimos en base a nuestro ki o chi -nuestra energía vital (como si fuera dinero en nuestra cuenta en el banco).
Hay varias clases de chi. El de la tierra, que lo conseguimos con la comida. El del aire, a través de la respiración. Hay otro ki acumulado a nuestro favor, que lo tenemos desde que nacemos.

Este últimos es el que nos interesa en este momento: ves a los niños, correr y jugar sin cansarse. Pues están usando ese ki que traen acumulado en su cuenta desde el momento de nacer. Pero al enfrentarse a las diferentes circunstancias de la vida, ese ki se va gastando. Y si no lo reponemos, es cuando empezamos a enfermar y claro, al gastarse, morimos.

El asunto es, ser equilibrados e ir reponiendo el ki que vamos usando. ¿Entiendes? Es como ir usando el dinero en nuestra cuentas de banco e irlo reponiendo de igual manera. Es un equilibrio.

Ah bueno, pues, el azúcar y las harinas y demás productos refinados, no nos aportan ningún ki (ellos no tienen ninguna energía vital en sí mismos) y al contrario nos hacen gastar nuestra reserva de ki para reparar el daño que producen en el cuerpo.

Es como usar en un carro una gasolina o algún producto que no esté diseñado para el mismo, a la larga te tocará pagar para que reparen el daño causado por ese producto. Nos costará dinero de nuestra cuenta. ¿Se entiende?

Y claro, las semillas y las hojas verdes tienen ki en abundacia. ¿ves ahora la diferencia?

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